Reiki
es un sistema de sanación y relajación de gran ayuda ante cualquier
enfermedad o condición física y es aplicable a toda persona
independiente de su edad.
De
manera que siempre se puede dar Reiki a bebés y niños pequeños.
Reiki
es un excelente complemento de cualquier tratamiento que el niño
tenga, pues contribuye a la relajación, lo que puede tener como
efecto, por ejemplo: reducir fiebre, dolor y calmar al niño.
La
persona ideal para dar Reiki a niños pequeños es su mamá o papá,
por varias razones:
1-
Los padres tienen una relación de confianza con el niño, la que a
veces es difícil establecer con un terapeuta, hay edades en que los
niños no se dan con personas extrañas a su círculo cercano.
2-
Si el niño se siente mal es poco probable que desee que una persona
que no conoce se acerque a él.
3-
El niño comparte energía con sus padres, y se puede sentir invadido
por la energía de una persona que no conoce.
4-
El tratamiento ideal para un pequeño es a diario, en sesiones cortas
de 10 a 20 minutos, según su edad.
5-
No es recomendable sacar al niño de su ambiente protegido si está
enfermo.
6-
Es importante respetar sus ritmos, y los padres pueden elegir el
mejor momento para darle Reiki, que muchas veces podrá ser durante
el sueño.
7-
El tratamiento es intuitivo, y quien mejor para saber las necesidades
de su hijo, que la mamá o el papá.
8-
La terapia Reiki, se puede aprender fácil y rápidamente en un
taller inicial (Nivel Uno), y no se necesita ninguna condición
especial o requisito para hacerlo.
9-
Si aprendes Reiki no solo vas a tener la posibilidad de ayudar a tu
bebé, sino también al resto de tu familia y a ti mismo, con esta
práctica. Lo cual te traerá muchos beneficios.
10-
Reiki fortalece el apego que tienes con tu hijo.
Te
invito a realizar un taller de Reiki, los beneficios son
múltiples y duran el resto de la vida.
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